Asumo que toda persona que les esto se le hará familiar, quien quita y algún lector hasta esté del otro lado. Todas las entidades financieras tienen un área de cobranzas o un servicio de cobranzas contratado, y hoy por hoy la gran mayoría de locales de venta de ropa, electrodomésticos y demás.
Es típico uno se pasa un día de la fecha de pago y empiezan las llamadas. Eso es normal lógicamente, uno no está cumpliendo con una obligación adquirida, cuota de préstamo, pago de tarjeta de crédito, el último pago de la televisión que en su momento fue nueva y cuando ya es completamente de uno ya cae de obsoleta y uno la encuentra a mitad de precio en el mismo local, pero bueno volviendo al tema, empiezan las llamadas.
Cobrador/a: buenos días / tardes / noches (sí... hasta de noche me han llamado) el señor Andrés Rodríguez
Yo: sí con el mismo... (siempre me ha dado ganas de decir el mismo que viste y calza sobre todo cuando me han llamado los de De Prati)
Cobrador/a: ¿cómo está señor Rodríguez? Le estamos llamando de la entidad correspondiente para decirle que debe tanto de la cuota N por el concepto tal.
Yo: ah sí. (osea claro que sé que no he pagado)
Cobrador/a: quisiera saber si podemos contar con su pago el día de hoy.
Yo: no, seguramente para tal fecha
Cobrador/a: está bien entonces dejo registrada en el sistema la fecha tal... ¿cuál es el motivo de su demora?
Yo: pretexto aleatorio
Cobrador/a: listo contamos entonces con su pago
Yo: gracias por su llamada
La última frase nunca se la esperan, creo que están acostumbrados a que nadie se los diga, la verdad a mí sí me sirve porque ya me cuentan el valor exacto que debo depositar y ya pues, así salgo también un poco de lo que estuve acostumbrado por culpa del Banco Solidario... Algún rato ya escribí sobre el banco aquel que tiene a un grupo de gente que deja bastante qué desear cuando llaman a cobrar... Hoy por hoy me he topado con gente alhaja sobre los del De Prati son más tranquilos que hasta por eso voy y pago de una, no sin antes recibir un recordatorio claro, ja.
Hay algunos cobradores que se toman esto muy personal, que empiezan a llamar como que fuera plata de ellos, que se indignan e insultan, que gritan, que amenazan, lógicamente con ese grupo no hay cabida para la conversación modelo que incluí antes... Ahí vamos directo a la insultada y se cierra la conversación con algo del tipo ya dejen de llamar a joder o voy a hablar con su superior. Lo gracioso es como reaccionan cuando en verdad se habla con el superior y les cae una multa o algo... Ellos que pensaban que hacían muy bien su trabajo al hostigar a la gente.
Sana envidia a quien no haya tenido que lidiar con este tipo de llamada, y del chulco mejor ni hablo.
Eso no más.
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