viernes, 27 de junio de 2008

De chupes y chuchaquis



Por voluntad propia (creo) me he hecho a la cultura alcohólica. Es decir disfruto de esas reuniones donde no se hace más que beber y hablar y hablar. Bailar. Uno aprende a disfrutar ese bienestar que se trastorna y que se vuelve malestar al poco tiempo. es bastante anecdótico.... Sin embargo con el pasar del tiempo también se va "madurando" por así decirlo y uno ya no hace las mismas burradas de antes... por ejemplo... ir a beber en la Mama Negra (fiesta ecuatoriana) como incoherente y perderse en medio de la mulitud luego de haber armado una pelea contra unos rockeros armados con puñales.... o beber dos dias y luego darse cuenta que a las 10 de la noche uno está en la Ofelia (barrio del norte de Quito) y uno vive en Chillogallo (barrio del buen sur de Quito)... uno aprende a cuidarse... es necesario pasar por lo malo para aprender.. por suerte he salido totalmente ileso...

Ahora lo que sí es muy gratificante tomarse un trago con la familia... con la mujer que uno ama... es exquisito... y al otro día uno se aguanta el chuchaqui (guayabo, cruda, ratón, resaca, hang over) con todo el gusto del mundo ...