Palabra de la semana: Exclusivo

A los tiempos un post de este tipo.

exclusivo, va

1. adj. Que excluye:
   esta propuesta es exclusiva de todas las demás.
2. Único, solo:
   esta especie es exclusiva de la región.
3. f. Privilegio o derecho adquirido para hacer algo prohibido a los demás:
   vendió la exclusiva a esta revista.

 Últimamente ando sacando un lado de resentido social que andaba dormido desde hace algún tiempo.El otro día ... de hecho  hace mucho tiempo, este post lleva como borrador un par de meses, pasé por una de esas construcciones que Uribe&Schwarzkopf anda haciendo por la 6 de diciembre, diagonal al Megamaxi en Quito. Entre todas las frases vendedoras que tenían esos edificios de departamentos es que eran EXCLUSIVOS, así con mayúsculas y con letras muchos más rimbombantes que las que se manejan en este blog. (Rimbombante es otra palabra que merece post). 

En eso se me vino a la mente pensar en la palabra "exclusivo" y su sentido estricto. Nos la pintan como lo mejor. Lo exclusivo. Esta es una de las cosas más mierdosas de nuestra sociedad. Desde hace siglos que es una sociedad exclusiva, o dicho de otra forma (y como yo lo estoy viendo) excluyente. No se piensa en el bien común, sino en excluir al resto, demostrar que tienes algo que los otros no para decir que eres mejor, vives en un vecindario exclusivo, implica que no cualquiera puede estar ahí. Es exclusivo, los edificios de oficinas exclusivos, todo llevado por la apariencia mientras más exclusivo mejor. De eso se vive hoy por hoy de la apariencia. 

Por experiencia propia he podido ver cómo muchas de estas personas que viven exclusivamente son un mierda de personas, con esto tampoco quiero decir que todos deberíamos vivir en la miseria, tampoco que todos debamos tener todo porque sí sin ningún esfuerzo, lo que me cabrea es que no todos tengan las mismas oportunidades por un sentido exclusión, quienes ya forman parte del sector exclusivo no están interesados en que los demás lleguen, mientras menos sean mejor, más exclusivo, menos riesgo de dejar la exclusividad para cambiarla con esa cochina inclusión que nos deja a todos en el mismo nivel y con las mismas chances de llegar a alguna cima, cualquiera que esta sea.

Sería genial que en cierto momento de la vida todos empecemos con las mismas oportunidades y entonces sí destaquen los mejores. Me he topado con mucha gente brillante en trabajos de mierda, me he topado con mucha gente incompetente en altos cargos porque están apadrinados. La nota es que tanto los unos como los otros creen que merecen estar donde están. Estamos tan condicionados y acostumbrados por esta sociedad exclusiva y excluyente que la gente hace las más grandes idioteces por plata, porque es a fin de cuentas la plata la que te garantiza llegar al sitio exclusivo, y justo esa es la falla. Así como hay mucha gente valiosa que se caga en plata de buena forma, hay tanta otra que incluso con plata mal habida se las dan de dandis y se vanaglorian de vivir, manejar y comportarse de forma exclusiva. 

Si algún día el parámetro para decidir quienes deben ser excluidos sean las buenas obras, la buena onda, la forma como se ayuda a los demás, o en otras palabras el más inclusivo queda, obviamente en ese momento nadie quedaría por fuera, por aquello de que los inclusivos reinarían. (Ya me estoy yendo de fábulas, al diablo) Pensar en una sociedad donde no se margine a nadie, donde la gente no se sienta relegada, donde tengan todos las mismas oportunidades. Donde todos tengan un lugar donde vivir que se vea como los que hoy por hoy son exclusivos. Pero este sistema en el que vivimos hoy por hoy no permite esto, ni lo permitirá. Y hacerle al comunismo tampoco. No puedo creer que entre millones de personas que somos, no exista otro sistema para administrar el planeta, a alguien se le debe ocurrir algo, algo que nos saque del camino decadente en el que andamos.  

En fin por hoy paro el divague.

Creo que a veces no nos detenemos mucho a pensar en las palabras que se usan a diario. Simplemente es algo que ya aceptamos como normal. Sin embargo de una forma u otra condicionan nuestro comportamiento.